La posición de Freud respecto del tema de la contratransferencia se describe a menudo pretendiendo que el analista muestre una actitud impenetrable y fría respecto del paciente. Así, por poner el ejemplo de un autor prestigioso, R. D. Hinshelwood afirma en su artículo La contratransferencia (2001) que Freud “requirió que fuera eliminada por el autocontrol del analista. A menudo imaginó su aproximación técnica en los términos impersonales de la mirada de acero del cirujano (1909) o del receptor telefónico (1912)”.

La siguiente cita que hemos encontrado en una carta de Freud a Ludwig Binswanger –escrita el 20 de febrero de 1913–, puede servir para matizar y dar cuenta de la complejidad del pensamiento freudiano.

 

El problema de la contratransferencia que usted evoca[1] es uno de los más difíciles de la técnica psicoanalítica. Teóricamente es, pienso, más fácil de resolver. Lo que se da la paciente no debe ser jamás un afecto espontáneo, sino que debe ser siempre conscientemente expresado, en mayor o menor grado según las necesidades. En ciertas circunstancias, es necesario dar mucho, pero nunca nada que haya surgido directamente del inconsciente del analista. Para mí esta es la regla. Hay que reconocer y superar cada vez la contratransferencia, para ser libre uno mismo. Dar demasiado poco a alguien porque se le quiere demasiado, es perjudicar al enfermo y es un error técnico. Todo esto no es fácil y quizás sea necesario un poco más de experiencia.

 

La amistad entre Sigmund Freud y Ludwig Binswanger (1881-1966), psiquiatra suizo y pionero del psicoanálisis existencial,  se extendió durante un periodo de treinta años. Hemos utilizado la edición francesa: Sigmund Freud/Ludwig Binswanger , Correspondance 1908-1938, Calman-Levy, 1995

 

[1] La discusión de este tema ha debido ser provocada por la lectura de Binswanger del trabajo de Freud “La dinámica de la transferencia” (1912b). El concepto de contratransferencia aparece por primera vez en Freud en Perspectivas de futuro de la terapia psicoanalítica (1910d)

 

Referencias bibliográficas

Freud, S. (1912), “Sobre la más generalizada degradación general de la vida erótica”, en Obras completas, XI, Buenos Aires, Amorrortu.

Freud, S. y L. Binswanger, Correspondance 1908-1938, Paris, Calvey-Levy.

Hinshelwood, R.D., (2001), “La contratransferencia”, en Libro Anual del Psicoanálisis, 2001.